Una asiática que entiende bien que su futuro no va a esperar, es colegiala de día y en la tarde, luego de salir, es una prostituta. Ya está asegurándose de ganar dinero para hacer lo que quiera con su vida. Y disfrutando también.
Ya que vive el sueño. Todas las jovencitas de su edad quieren tener una polla en la boca todos los días. Ella tiene muchas y diferentes todas. También puede disfrutar del placer de una follada. Digamos que su coño no carece de orgasmos y eso, también es lo que todas quieren.
Las chicas de su edad quieren muchas cosas, eso está claro. Bolsos y zapatos más que todo. Sin embargo, eso es algo que tampoco le va a faltar. Su familia seguramente debe estar muy orgullosa ya que la pequeña, ya sabe cómo hacer dinero y nadie le tuvo que enseñar a hacerlo.