Ya con sus colores en el cabello, se siente muy atrevida y sabiendo que tiene tetas grandes, entonces lo mejor es mostrarlas y dejar claro que es una colegiala muy zorra. Esto se complementa cuando vemos su coño divino y apetecible.
Digamos que es parte del ritual de hacer que los machos se calienten que es normal y hasta necesario en estos días; algo con lo que no creo que podamos vivir. Es decir: las fotos caseras de una jovencita desnuda en nuestras pantallas, es parte de esa nueva normalidad que nos gusta.
Y creo que hablo por todos cuando digo que nos hace falta ver un buen culo a diario y así poder sobre llevar todo lo que implica mantenerse cuerdo en estos. O simplemente porque somos unos pervertidos que necesitamos apreciar la belleza de una fémina constantemente. Como sea, da igual.